
20 Oct Las estrategias de inversión a corto plazo
No hace falta ser un experto en finanzas para saber que no es lo mismo plantear una inversión a corto plazo que focalizarla, por ejemplo, en el periodo de la jubilación. El factor temporal es decisivo en cualquier operación. Hoy, nos ocupamos de las estrategias de inversión a corto plazo.
El tiempo marca las estrategias de inversión
En este sentido, hay tres grandes tipos:
- A corto plazo: son las inversiones que tienen una duración aproximada de hasta un año. El beneficio se pretende conseguir antes de cumplir ese límite temporal.
- A medio plazo: corresponde a las inversiones realizadas entre uno y cinco años.
- A largo plazo: son aquellas operaciones que se prolongan más ya que su plazo supera los cinco años.
Ventajas de las estrategias de inversión a corto plazo
Para decidir qué tipo de inversión te conviene más, es importante tener en cuenta sus ventajas. En este caso, la seguridad y la liquidez son las más importantes.
Hablamos de seguridad porque, en un plazo de tiempo tan reducido, apenas hay espacio para los imprevistos y la incertidumbre.
Por eso, la bolsa no es el mejor escenario para las estrategias de inversión a corto plazo. Su comportamiento es difícil de predecir y los riesgos son muy elevados. No es recomendable. Sí lo es para las operaciones a medio o largo plazo ya que la volatilidad se diluye en el tiempo.
Por su parte, la liquidez hace referencia a la propiedad que tienen los productos financieros y de ahorro para convertirse en dinero. A mayor liquidez de un producto, mayor facilidad tendrás para recuperar el dinero.
Desde BIP queremos proponerte tres tipos de inversiones a corto plazo:
- Depósitos: La rentabilidad es un valor fijado de antemano por lo que la seguridad y la liquidez es, en estos casos, elevada. El funcionamiento no puede ser más sencillo: el cliente deposita su dinero en el banco durante un plazo de tiempo previamente pactado. Transcurrido ese período, recupera el 100 % de su inversión, junto con una remuneración extra, con los intereses generados. Y todavía un apunte más. Existe la creencia de que cuánto mayor es la inversión, más grande es también el beneficio. Pero hoy en día, muchos bancos ofrecen rentabilidades altas a cambio de inversiones iniciales realmente modestas.
- Letras del Tesoro: Puedes obtenerlas a partir de los 1.000 €. Son valores de renta fija a corto plazo que se emiten de la siguiente forma: 3 meses, 6 meses, 9 meses y 12 meses. Además, destacan por ser activos de muy bajo riesgo. En términos de rentabilidad, hay activos más interesantes, como la propia deuda pública a cinco años, por ejemplo. Por eso, es recomendable no poner todo el grueso de tu cartera en este único escenario. ¿La alternativa? Escoge la diversificación.
- Inmuebles: Desde el inicio, en BIP siempre hemos apostado por un concepto de gestión de activos inmobiliarios que nosotros mismos hemos creado y que ofrece a sus inversores una alta rentabilidad. Lo hace, además, con el objetivo de garantizarla a corto o medio plazo; es decir, en un período menor a los doce meses.
BIP es un concepto innovador que presta servicios en el sector inmobiliario desde la base de la integridad, especialización, profesionalidad y transparencia de un gran equipo profesional. De este modo, se da un valor añadido a los proyectos inmobiliarios que se gestionan.
¿Quieres más información sobre estrategias de inversión a corto plazo? Contacta con nosotros para resolver todas tus dudas y compartir tus proyectos de inversión.
Jordi Brun
Owner y CEO en BIP Investment Properties